Græville

The Author is not quite sure what the græville means. Because Græville is not a story. Nor philosofy. Nor a way of expressing his soul. It is just a græville.

[] Here the Græville is:

Græville 1

Mamá vendrá de nuevo a levantarme, piensa Ámila, quien medio abre los ojos apenas lo suficiente para ver cuando su mamá entra a la habitación pero que crean que todavía está dormida. Pero la mamá simplemente trata de levantarle las cobijas que Ámila agarra con fuerza. ¿Por qué los padres siempre tienen que despertarlo a uno cuando uno está durmiendo? Que el chocolate se está infriando dice mamá. Como diría Eneli: ¡Ay, mami, deja que se infrie! ya voy más tardecito. Pero no, yo estoy dormida. En realidad Ámila no estaba interesada en tomar el chocolate frío, tampoco quería que el bus la volviera a dejar como el lunes. Aunque siempre es chévere ir en el carro de papi hasta el colegio.

Al fin en chocolate no se enfrió, ni el bus dejó a Ámila, quien salió como todas las niñas juiciosas a tiempo para el colegio. Eneli por otro lado estaba muerta del cansancio. No se por que a otros les gustan los viernes, yo los odio. Era el quinto viernes en linea que amanecía enguayabada y fuera de eso para que la recibieran con cálculo en el colegio; cálculo, el cucho de español dice que la palabrita viene del latín y significa piedra y que piedra la que le da a uno tener que madrugar p'aguantarse a ese viejo. No, pues sí, por las tardes los viernes son otra cosa, pero por la mañana que uno tiene que madrugar, con el guayabo de la noche anterior. ¡Ay, mami, deja que se infrie! ya voy más tardecito, fue lo primero que se le ocurrió decir sin pensar que eran las mismas palabras que utilizó el jueves, y el miércoles, y el martes, y el lunes, y el domingo antes de ir a misa, y el sábado antes del paseo y hacía ocho días... Pero al fin, con un dolor de cabeza ni el hijuemadre, los ojos cerrados y tanteando el camino hasta la cocina llega a tomar el café frío mientras su hermanita sale corriendo a subirse al bus.

Sería lo dormida que estaba pero cuando el agua fría salió por la regadera, el grito y el susto logran por fin despertarla y calmarle el dolor de cabeza. Sale de la ducha para controlar la temperatura antes de volverse a meter bajo el chorro e intenta en una larga ducha ponerse lista para el día que ya empezaba llegando tarde a matemáticas. Una vez vestida y arreglada con su personalizado uniforme, subido sobre las rodillas y con las medias caídas, maquillaje por encima del reglamentario pero necesario para ocultar las ojeras y los rastros de la fiesta de anoche, convence a Papi que le dé para un ejecutivo tras no lograrlo convencer de que la lleve en el carro, y por fin, con media hora de retraso llega al colegio.

Ámila comenzaba los viernes con clase de historia y en el tema de la clase de hoy hablaban de los presidentes de la hegemonía conservadora quienes por lo general eran malos presidentes que mataban a pobres campesinos explotados por la yunait frúit cómpani aunque es bueno recordar que fueron los conservadores los que salvaron al país cuando éste decaía tras la constitución radical de Río Negro. Uno nunca entiende a estos profesores de historia, pero me gustan las clases porque hace unos dibujitos todos chéveres en el tablero.

Græville 2

Hay momentos en que no sé donde estoy, las imágenes ante mi son fantasmas en los que no puedo confiar.  Lo mejor es vencerlos, acabarlos, pero no se puede acabar unas sombras sin destruir algo más importante, más bello tal vez, el objeto mismo que produce las sombras o la luz que hay detrás de cada una.

No hay luz, ni hay sombras.  Ahí caes en la trampa platónica.

No es ese el error, no son sombras, no las que conocemos que produce un objeto detrás de la luz, cuando hay luz.  Estás comparando lo que vez con un punto tal vez más fácil de explicar, pero las figuras no existen.  Son imposibles si queremos llegar.

Pero no sé donde estoy aún.  Lo único que puedo intuir en este momento es que los fantasmas deben desaparecer, no pueden existir si queremos realmente llegar.

Y te olvidas por qué queremos llegar.

No nos basta con conocer la luz... sí, tienes razón.  Fue egoísta de mi parte.

Y no hay luz que produzca las sombras.  Que produzca el reflejo de la realidad pura en este mundo imperfecto.  Es aceptar el principio básico de nuestra carrera.

¿Cual carrera?

¿Qué palabra?

Disculpa.

En el camino encontraron una muralla, una barrera.  ¿Y qué idea puede haber de como franquearla?  ¡Sí que es alta! y malparidamente ancha.  Y es una barrera rara.  Entre más imperfecta es la barrera, más infranqueable se pone.  Pero se puede conocer bien, y conociéndola se puede llegar al tope de la barrera, abarcarla toda con la vista y cruzar al otro lado.  Donde tal vez nunca termine pero si deje de ser barrera.  ¿Pero cómo conocer esta muralla?  ¡Ay! y uno que no estudió p'aboga'o.  Por esa barrera es que hay sombras y fantasmas que amenazan la carrera.  Por la barrera es que se supuso una luz detrás de esas sombras, pero es la barrera la que no deja ver esa luz.  ¿O es la barrera la que no deja ver que es lo que oculta realmente la luz?  Pero si no hay luz, sólo se supuso.

Lo otro es pasarla por abajo, por sus bases, sin duda caerá encima de nosotros, pero frescura, no es una barrera que al caer aplaste.  No es una barrera en lo absoluto, es sólo la forma en que ella deja verse.  Igualmente puedo ver un abismo aquí que un muro.  Y ni es un abismo ni un muro.

¿Por qué no?

No tiene sentido.

¿Qué sentido?  El sentido no existe.

El sentido inverso.  O el sentido norte.  El sentido común, tal vez.  O sin sentido, como aquí.

¡Deja 'e joder!

Bueno, yo me bajo aquí, ¿qué le digo a mi mami?

Que me llevé a Ámila al cine y a eso de las nueve o diez estamos llegando.

Græville 3

Sin duda fue una cosa totalmente distinta lo que vieron los tres.  Luego que realidad tan trascendente puede verse cara a cara en un situación como tal sin que las impresiones jueguen un papel importante en la interpretación.  ¿Cómo más se puede pensar ante Él, cara a cara con Él, si no es por medio de una noción preconcebida?  Pero se está ante el Todo y la Nada ante si, el principio de todo, el fundamento de ser yo, de ser tú, de ser él, o ella, o Ámila, o Enali o Idaló, y el final de todo, y Todo es sí mismo y Nada no es nada, es decir es algo en la doble negación del castellano.  Pero el castellano es una parte y muy restringida de la comprensión del Todo y la Nada, el uno y el cero y el todo que contiene todo incluyendo al uno y al cero, al principio y al fin y a mí y a ti y a la nada.  Y la Nada que no contiene ni a sí misma.  Y la Nada es la base de todo, por que es lo mismo que el Todo... es el mismo, por lo menos.  Pero falta algo que no vimos.  ¿Está aquí, o está en otra parte, o está en nosotros?  Es el ser lo que no vimos, aún cuando vimos el conjunto de todo, que es el mismo conjunto de la nada, o mejor, el conjunto nulo.  Es el ser y lo que hay después del ser.  Pero nada hay ahí, ni un todo, ni una nada, ni un ser, ni el ser siguiente al ser, porque algo sobra.  Si está la nada, el no ser, y el ser, y el ser después de ser, y el no ser es el ser, el todo se deduciría de todo ello.  No, se corrige: todo se deduciría de esto, y este todo, por más todo que sea, no incluye al todo.  Luego si Él es el Todo y la Nada, y el Ser y el ser Después de ser, no es el más que el todo que no es, y la nada que tampoco es, y si no es, ¿como puede entonces el ser ser? y sin ser, nada hay después de ser.  Y viéndolo cara a cara hemos demostrado que Dios no existe, y las matemáticas no existen, y la lógica no existe y no hay algo que exista porque éste sería un algo y todos los algos que existen son un todo.  Pero yo existo y René Descartes existe, al menos en mis recuerdos.  Y el Dios creador existe, porque si no me creó, soy yo quien lo creó y creo en Él.  Y algo vi, que llamé el todo y la nada; es el uno y el cero.  Y el ser es el número, y del ser después de ser es el número consecutivo.  Luego vemos la relación de que si la nada es, llegaremos poco a poco a que después de la nada está el todo.

Entonces pueden nuestros amigos volver.  Ya vieron la luz que el fundador de la academia reveló y tienen que cumplir el propósito que les indico: salvar a los encadenados de la oscuridad, llevarlos por el sendero que atraviesa la barrera de la comprensión para que vean la tan esperada luz.  Y descubrir que la realidad de las ideas no es perfecta.  Es nula sin la verdadera realidad que hemos llamado sombras.  La figuras no existen.  Sólo envician.  La realidad que conocemos no es una caverna, no son una caverna los millones de niños que mueren de hambre cada año sin haber escuchado siquiera la palabra realidad.  Aún si vale más saber que vivir, ¿de qué sirve morir sin lograr saber? y si vale más vivir que saber, ¿de qué sirve morir de todas maneras?  Alguien puede tener la respuesta, y la respuesta es verdad mientras no contradiga algo que ya ha sido tomado como realidad.

Retórica.

Nunca hemos cruzado la barrera ¿sabes?

Lo hemos hecho, en realidad, sólo que a cada descuido regresamos de nuevo a este lado.

Græville 4

Era como si estuvieran atrapados en el cuarto.  Lo estaban realmente porque cualquier intento de salir podría significar la muerte.  Estaban muy lejos de donde pedir ayuda.  Aún Ámila se encontraba perdida para ellos... o ellos para ella.

No pienses en ella.

No pienso en ella.  Eres tú la que piensa.

Puede que sí, pero tú no tienes por que negarlo.

¿Estamos discutiendo?

No estoy discu...  Tengo miedo.

¿Por ella o por nosotros?

Por los tres.

Ella está bien.

No hables de ella.  Tengo miedo por mí.

Cuantas veces he querido decirte que te amo, amigo mío... y lo único que haz logrado es que cele a mi hermanita.  Te odio.  No sabes qué es lo que temo.

¿Crees que soy machista?

Ss...íi.

¿Síi?  Y a ver ¿por qué? pela'a.

Me importa un culo.

No seas grosera.

Y qué mierda, si me da la puta gana.

Yo también tengo miedo, pelada.  No sé, veo tus ojos y veo como quieres cerrarlos para ocultarme lo que piensas de mi.  Casi creo adivinarlo.  No es raro, ya antes lo había creído.  Pero temo equivocarme.  Bien puede ser mi egocéntrico punto de vista.  Pero te amo y tengo miedo, miedo de que no me ames.  Maldita sea.  Maldito el día en que me metí con tu hermana.  Pero sí: te amo, te amo, te amo.

Te...  Nada.

Te amo, amigo mío, y te deseo esta noche.  No importa.

Te amo, Eneli, te amo, amiga, y te deseo.

Creo que deberíamos dormir.  Mañana podemos ver si logramos salir.

Buenas noches, entonces.

Buenas noches, Idemó.

Y seguían mirándose a los ojos, sin la seguridad de interpretar correctamente la mirada de su compañero.  Puede ser que la telepatía exista, ambos interpretaban correctamente lo que el otro pensaba tras las palabras que no pronunciaban, pero igual pueden haber sido más de cinco años de una relación muy estrecha de amigos, en la que él había aprendido a reconocer los ojos con los que ella miraba cada muchacho con que había estado, cada novio, cada amigo, cada desconocido y cada caspa.  Igual era para ella.  Pero nadie confía en el lenguaje de los ojos, un lenguaje en el que una mota de polvo puede hacer resbalar una lágrima, o tres días sin comer ni dormir, redefinir completamente unos ojos abiertos y unos hundidos.  No era indicio suficiente para levantar la mano y tocar la cara del otro y acercar sus cabezas para un primer beso entre ellos o para desabotornarse la blusa o la camisa, bajarse los pantalones y comenzar a hacer el amor.

Tan fácil sería si no fueras mi amiga.

Si no temiera dañar esta amistad, amigo.

Y sólo el cansancio los fue logrando vencer poco a poco y en una rincón de la pared se sientan recostados el uno al otro, mirando al extremo opuesto de la habitación procurando perder la mirada entre los ojos de los muñecos de peluche y los arabescos de la pared en la habitación en la que Eneli ha pasado su niñez y su adolescencia.  Una mirada que poco a poco se hace más difusa, hasta que el cansancio les hace cerrar los ojos y sumergirlos en sus pensamientos metafísicos.  Oyendo el golpeteo de la lluvia contra la ventana, el tictac del reloj y la respiración de su amado amigo, tan cerca pero tan lejos.

Græville 5

Pero la muralla no era solo la muralla de Cervantes, donde entre caminar y caminar habían pasado de largo a Macondo y a Ortega y Gaset.  La muralla era más antigua, tan antigua como el hombre que la habitaba.  Y era una muralla extraña, una muralla nueva cada momento.     Objeción.  El momento no existe.     No importa, pero se entiende.

Una muralla cambiante, pero jamás superada, una muralla que Zenon se aseguró de hacerla más impenetrable, pero sólo a los que lo escuchan, una muralla llena de pasadizos secretos y trampas, una muralla donde podemos encontrar todo lo que la mente humana puede decir.  Una muralla tan alta como la torre de Babel, que está casi a punto de rozar el cielo, pero mucho mas ancha y complicada de lo que el hombre jamás se ha imaginado la torre de Babel.

Cuidado con los absolutos.

Cuales absolutos.

El "jamás" que se usó; y dos veces.

Es una figura, un recurso expresivo.     Es la muralla.

La muralla es también una figura, si a eso vamos.

La torre de Babel también lo es, ¿o no?

Y es parte de la muralla.  Es la incomprensión que la muralla significa para nosotros, pobres mortales.     Mortales los perros.

O se puede considerar que la muralla es la torre de Babel, construida por nosotros los hombres para comprender nuestro mundo y lo que hay más allá de este mundo.  Para encontrar a Dios en el cielo, o incluso para no encontrarlo y así poder negarlo.

Y escribes dios con mayúscula.

No es problema de creencia, es cuestión de definiciones, es muy diferente un dios a Dios, y Dios no es necesariamente un dios como un dios si puede ser Zeuz o Odín, o el dinero como decía el cura de religión.  Dios es otra cosa, para empezar es un nombre propio y no se aplicara a ningún dios griego, romano o tecnológico.  Dios en cambio podría llegar a ser la razón sin causa, el motor inmóvil de Aristóteles, o el Padre de Jesús.  Jesús mismo si le creemos a los curas.

Regresemos a la muralla.

La confusión de lenguas no es entonces lo importante de la torre de Babel.  Es decir, que Kant, y Descartes, y Ortega y Gaset, y Platón, y Confucio, y Zoroastro hayan hablado distintos idiomas, que exista el castellano y el catalán y el inglés y el chino o los suecos y los finlandeses no tiene la mínima importancia.  No importa si es cognito ergo sum o Je panse parce je suis o I think then I am o Pienso, luego existo; lo importante es que se entienda, y eso resulta más problema de interpretación personal que de gramática.

Ahora sí me perdí.

El problema no es que un angloparlante interprete la máxima cartesiana diferente a como nosotros lo hacemos, o si esa fue escrita en francés o en latín o en lo que sea.  El que exista griego o chino no importa, la diferencia está en lo que piensa Platón o lo que piensa Aristóteles y lo que piensa Confucio o Mao Zedong.

Sólo que no llego al punto de qué tiene que ver con la muralla.

Estamos utilizando el mismo nombre para designar conceptos distintos.

Y ¿qué es un concepto?

¡Yo qué sé?!

Las divisiones del conocimiento designadas por nombres.  Incluyendo el conocimiento mismo y el desconocimiento.

¿Y qué es el desconocimiento?

El desconocimiento de no conocer lo que es el desconocimiento.

¿Que haces allá abajo?

¿Dónde abajo?

Tan abajo en la muralla.  Una trampa donde caíste.

¿Y quien dijo que abajo? ¿Es que acaso estás más arriba?  Tal vez no he caído, sólo que no he subido tan rápido como tú, y eso si es que has subido, porque esta muralla no tiene ni arriba ni abajo, ni un lado ni el otro, ni extensión en ningún sentido.  No tiene base tampoco.

¿Y por que le llamamos muralla?

Por darle un nombre

¿Que tal barrera?

Si quieres, pero es mejor no confundirnos usando veinte mil nombres para lo mismo.

¿Y el nombre verdadero?

¿Lo conoces?

El lenguaje humano.

¿Y por qué el humano? ¿y por qué uno?  ¿No será todo lenguaje?  Y eso si esta muralla es realmente lenguaje.  Tal vez sea simplemente el conocimiento, o la realidad platónica de las ideas.  Hablemos de la muralla mientras sepamos que es.

¿A que estamos llegando?

A trampas y trampas de la muralla, tal vez.

¿Alguien a quien pedir ayuda?

¿Qué une al conocimiento práctico del conocimiento del conocimiento?

¿Quieres decir a la ciencia de la filosofía?

Quiero decir eso mismo.

Me contaron que las matemáticas.

¿Quien te contó?

¿Importa?

Tal vez.  Tal vez no.

Græville 6

¿Por qué no habría de matarlo?

Porque no debes.

¿Y por qué no debo?  Es la pregunta que hago ¿No?

Por que está mal matar, sea a quien sea.

Eso es lo que dices tú, ¿O no?

P, pero no sólo yo.  Es la ley, es... no sé, un pecado si es que la palabra te dice algo.

Ley, pecado.  Para empezar hay dos tipos de leyes, pelada, las leyes físicas, que no existen pero las que eh son físicamente imposibles de contradecir y las leyes humanas.  Y decir que algo es pecado es una ley humana ¿o no?  Y una ley humana es algo que impone una persona, un grupo de personas, o una sociedad ¿no? y que no tiene nada que ver con lo que es la realidad ¿no?  No.

    No, No es una imposición sino un principio de convivencia y matar no va con esto, o sea... si es que matas por que se te da la gana, o sólo porque te pareció divertido estás diciendo que cualquiera puede matar, o sea, que aceptas el matar como una solución a, no sé, cualquier problema o algo así.

Y estás generalizando el hecho de que yo lo mate como que matar en general es acep...

No estoy generalizando, es que hay que partir de principios y un...

Estás generalizando, adem...

¡Pero no!  Yo digo: punto aparte, se acabó.  ¿Ya!

E...

¡Ya!

Pero es que...

Pero es que nada.>