Chlewey begun this new year traveling South into Pasto, being kissed for his first time and coming back to college for his fifth year. Not quite being senior due to a little backdrawn in his studies.
Little after Eastern, a girl he had met some time ago begun to become more and more important to him till Chlewey finally involved himself in a relationship. Her name was Luz Beatriz, and Luzby —as she is also called— and Chlewey made the relationship official on 20th May.
Chlewey stopped writing after that. As he found later on with some other friends who wrote, getting involved in a stable relationship hides the inspiration loneliness brings. But Chlewey is not worried about. He is still happy and well.
Pedí un papelito chiquito para escribir chiquito.
¡Y equibo tiquito!
Estuve feliz. Y me gustó.
Felizmente feliz, con esa emoción de descubrir algo nuevo.
De encontrar algo que creí perdido.
Y seguirá perdido, tal vez, pero ya no me importa.
Porque estuve feliz.
Mensaje: inconcluso
Canal: ruidoso
Emisor: triste
Receptor comprende.
Y salimos así, poco a poco, palabra a palabra de la obscuridad de un profundo agujero.
Le!
Podría salir en este momento
y vivir en un mundo enigmático y desconocido
Y podría probar con una nueva experiencia y un nuevo rumbo.
Podría simplemente olvidarme
de mis problemas e inquietudes...
Pero me da miedo.
Me da miedo que al escaparme me olvide de ti.
Es imposoble.
Imposoble establecer
un nuevo puente
y un nuevo lugar.
Imposible terminar e imposible concluir.
Imposible expresar todo lo que guardo y siento por ti.
Pensaba cómo llenar palabras y cómo abrir mi corazón sobre un papel en blanco.
Pensaba en esos instantes que suceden y nos sucecden y nos permiten decir que hemos vivido.
En instantes también que desparatan nuestro mundo y nos recuerdan todas las veces que hemos muerto.
Y así pasan los recuerdos y la mente queda en blanco en el momento justo de querer decir te amo.
Hay ocaciones en que hay decisiones para tomar, puntos claves en nuestras vidas...
y uno espera.
Se demora
Se demora en tomar una desición por la incertidumbre que el futuro genera
Y deja uno que el destino juegue con su vida... y juega.
Un juego de azar cuyas ganancias uno no aprecia y cuyas pérdidas lamenta.
Círculo convexo. Parábola
Un atardecr contigo
y una noche larga, extrañandote.
¡Vívo! ¡Lo sé!
Vivo pensando, pensándote, extrañandote
esperando ese momento especial para verte
sentirte...
Tu cara y tu piel entre mis manos...
Tu dulce voz susurrandome al oído...
Tu mano resbalando por mi pecho
Y volvió... lloviendo en todas partes
y escampando en tu mirada
Y es así como me absorbes tanto
absorción positiva
que mi mente sólo piensa en tu presencia
y el temor de tu partida
Círculo convexo. Parábola.
Palabras que curzan mi mente
una mente sin sentido
una mente en blanco que juega con mi vida y la oculta
que esconde lo que pienso
y salta juguetona entre realidades.
Era una gota de lluvia
un grandioso ser que quería abarcar al mundo
jugando con la luz y descomponiéndola en sus colores.
Era un mundo en sí misma
un destino de algo grandioso
abarcando el mundo para hacerlo fertil
para alimentar una cadena de pequeños mundos.
Era un sueño que se acercaba
dándose cuenta de la inmencidad de la tierra a donde llegaba.
Era mucho... y al acercarce a su destino tan poco
Era...
Crash! Pum! Cataplún! Zap!
Plif! Chap! Punch! Prak!
Paff! Zambomba! Krak! Zzip!
Siento que te vayas
que tengas que partir en este momento
rompiendo el silencio que nos rodea
en el que nos conocemos
en el que logramos escuchar nuestras almas
Pero ya te has ido
abandonando impunemente este momento
quebrando el instante
Pero espero
espero ese nuevo momento de volver a verte
y seguirte conociendo
¡plic! ¡ploc! Gota a gota caía la lluvia.
Hacía ya dos años que el gran Dapich había partido. Dos años en que en la aldea montañesa de Sápica los necios que selebraban si partida empesaban a extrañar a su gran sabio. Era invierno de nuevo y entre los verdes pinos la nieve asomaba haciendo presentir uno de los más helados de los últimos tiempos. Cuando las tormentas pasaban y el sol dejaba escapar algunos de sus rayos sobre las montañas, los hombres se Sápica arreglaban los techos y las paredes para proteger a sus familias. Y estaban en esa labor cuando un niño, tenía que ser un niño, quien jugando con la nieve vio a una figura caminando hacia él, hacia su aldea, y supo quién era, como ustedes lo saben, era el hijo de Dapish quien regresaba de su busqueda infructuosa por su ausente padre, regresando triste por la aldea que perdió a su sabio. Y pasó al lado de este niño quien le sonrió.
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